“La Sierra Nevada es el corazón del mundo, fuente vital y primaria de toda energía, origen de la vida y del equilibrio espiritual de Séineken (la madre tierra). La Sierra Nevada es casa sagrada, hogar sagrado y lugar de paz. Todo lo que vaya en contra del establecido orden de cosas, profana nuestra existencia, nuestras costumbres y nuestra profunda identidad con el mandato de nuestra ley de origen. Nosotros somos parte de la Madre Tierra y ella parte de nosotros: todo lo que ocurre a ella nos ocurre a nosotros, y lo que le ocurre a nosotros, le ocurre a ella”
Tomado
de Declaración al Mundo: kogui, kankuamos, Wiwas y Arhuacos.
El corazón del mundo es como denominan
las etnias indígenas a la Sierra Nevada de Santa Marta, donde habitan.
El Programa contra Cultivos Ilícitos-PCI,
su director, el general ® Rafael Alfredo Colón, realizó una gira por los
proyectos que tienen en la Sierra con indígenas y comunidades aledañas y a la
cual asistieron el Director de la Unidad Administrativa para la Consolidación
Territorial-UACT, doctor German Chamorro de la Rosa, el Representante en
Colombia de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito-UNODC,
señor Bo Mathiasen y funcionarios de las dos entidades.
Uno de los proyectos a visitar fue el de
ECOLSIERRA, entidad que produce café especial de acuerdo a las costumbres de
los Arhuacos de siembra y producción de cultivos, que es luego vendido en el
país y exportado a otros países por su alta calidad.
Danilo Villafañe, el canciller de los
Arhuacos, realizó una charla informal acerca del cultivo y estuvo presente en
la prueba en taza del producto, comentando acerca de sus propiedades
organolépticas y de su suavidad, perceptible en la misma prueba.
Danilo es un indígena que guarda sus
costumbres ancestrales sin olvidar que el mundo ofrece facilidades, por eso
viste impecablemente el atuendo de los Arhuacos a la vez que carga consigo un
Iphone 4 y utiliza botas especiales para escaladores.
“La Sierra, por sus condiciones de humedad,
ofrece opciones de ser utilizada con beneficios especiales para el cultivo del
café, que nosotros aprovechamos” nos cuenta.
Un sobrevuelo en helicóptero, por la
Sierra Nevada, ofrece a los visitantes la posibilidad de apreciar sus riquezas
y ríos como el Palomino, desde Santa Marta hasta Dibuya en La Guajira,
observando la riqueza del terreno y algunos de los diez pueblos indígenas que
el Estado Colombiano, de la mano del Departamento para la Prosperidad
Social-DPS y con el concurso del PCI, construyeron para las comunidades
teniendo como base sus costumbres y respetando su forma de asociarse y los
materiales típicos de la región.
Pagos condicionados en Tasajera
Los visitantes aprovecharon el inicio de
los pagos condicionados a 1.064 familias del programa Familiar Guardabosques
para hablar con las comunidades en el centro poblado de Tasajera, municipio de
Pueblo Viejo, en el Magdalena.
Cada familia recibe un monto en dinero
que es igual al monto que se entrega para proyectos productivos en la región
entre los que se cuenta la siembra de café, cacao, plátano, yuca, frutales y el
levante de pollos y cerdos.
Así, además de contar con alimentos para
sus subsistencia, obtienen una fuente de recursos que a través de asociaciones
y sus fondos rotatorios administran y logran desarrollar cosechas y
comercialización regional.
En medio de la algarabía de los niños, la
programación cultural con bailes típicos y con el acompañamiento del Banco
Agrario que cambia de inmediato los cheques entregados por dinero efectivo a
las familias vinculadas, se dio inicio en Tasajera a los pagos condicionados con la entrega del
primer cheque, por parte del doctor Chamorro de la Rosa, a la primera familia.
Posadas Ecoturísticas
El Programa contra Cultivos Ilícitos de
la UACT ha desarrollado, junto a las comunidades, tres proyectos de posadas
ecoturísticas en las estribaciones de la Sierra Nevada, de fácil acceso por la
vía que conduce al parque Tayrona.
Una de ellas, Los Calabazos, fue visitada
por la comisión, en lo que antes fueron diez hectáreas de coca ahora se
encuentran tres cabañas dotadas con todas las comodidades para recibir a los
turistas, especialmente extranjeros que visitan la región.
Los Calabazos cuenta también con comedor
y cocina general, caminos y puentes en medio de una zona selvática muy verde
donde es posible adoptar un árbol a partir de diez mil pesos y recibir
fotografías vía internet para comprobar su crecimiento y cuidado.
El proyecto es administrado por seis
familias de la comunidad y de él se benefician más de treinta familias, según
nos explica Emiro, su actual administrador.
Germán Chamorro de la Rosa, director de
la UACT, se comprometió con la comunidad a gestionar un pequeño puente de
ingreso a las posadas que facilitará el acceso de los visitantes a este mágico
lugar.
Un día en los palafitos
En el muelle de Tasajera, en la Ciénaga
de Santa Marta, la comisión visitante se
embarcó con rumbo a los palafitos de Nueva Venecia y Buenavista
donde cientos de familias habitan, hace más de un siglo, en medio del
mar, con casas construidas sobre palafitos.
Con el acompañamiento de los funcionarios
de UNODC que trabajan a diario en la zona con las familias y sus asociaciones,
se visitaron proyectos de jaulas para tilapias que son vendidas a empresas nacionales,
de cría de pollos y un apiario de 24 colmenas.
Los niños de Buenavista, sobre el puente
de entrada, dieron la bienvenida
ondeando banderas y cantando el himno nacional. Luego algunas personas
de la comunidad contaron cómo es su vida a partir de los proyectos productivos
y Óscar Hernández, representante de Buenavista manifestó que “estamos muy
contentos porque el Estado Colombiano ha hecho presencia desde hace seis años
en nuestra comunidad y nos ha ayudado a vivir en paz, somos más unidos ahora,
tenemos asociaciones y proyectos que manejamos entre todos y la comunidad se
encuentra contenta y con ganas de trabajar”
La gira finalizó con un almuerzo en
Buenavista con sábalo pescado ese mismo día en la Ciénaga que cuenta con ríos
afluentes a la vez que se beneficia de la entrada del mar, lo que les
proporciona peces de agua dulce y salada, además de los que ellos siembran en
las seis jaulas que actualmente poseen.
Y como dice la declaración de los
indígenas, la Sierra es casa sagrada, hogar sagrado y lugar de paz, ¡qué duda
cabe!
AMP.
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